El mantenimiento adecuado de una nave industrial es parte fundamental de una empresa. Una nave en buenas condiciones asegurará el correcto funcionamiento de la producción o la actividad que en ella se desarrolle, así como el bienestar y seguridad del equipo. ¡Nadie quiere que en su lugar de trabajo haya goteras, grietas o escombros! ¿Quieres saber más? ¡Adéntrate con Construcciones RM!

Tipos de mantenimiento

Cuando hablamos de mantenimiento debemos tener en cuenta que existen dos tipos: el mantenimiento preventivo y el correctivo.

El mantenimiento preventivo hace referencia a aquellos cuidados que se deben realizar para anticiparse a cualquier problema, es decir, es ir revisando los puntos más críticos de nuestra nave industrial para evitar problemas mayores en un futuro. Ejemplos de este tipo de mantenimiento serían: la limpieza y cuidado de la cubierta de la nave, la revisión de la estructura y cierres, mantenimiento de las instalaciones eléctricas, acondicionamiento del diseño del local (pintura, acabados, etc.)

El mantenimiento correctivo, como bien dice su denominación, es para solucionar incidencias o problemas que ya hayan ocurrido. Si una tubería está rota, si la cubierta de la nave presenta imperfecciones, si existen humedades o goteras, si las paredes tienen grietas o golpes, si el revestimiento está dañado, si existen materiales dañinos para la salud en la estructura… ¡Es necesario hacer un mantenimiento correctivo!

Ventajas de un correcto mantenimiento

Ahorro económico: En el proceso industrial el tiempo es oro, ¿te imaginas perder un día de producción?… ¡Impensable! Por ello, resulta tan fundamental que un experto valore tu recinto industrial para detectar problemas y, así, ponerle una rápida solución. Cuánto más tiempo tardes en ver el problema más caro será el arreglo.

Cuidado de imagen de marca: Una nave cuidada proporciona una imagen mucho más positiva para la marca. Ningún cliente, distribuidor o proveedor confiaría en los productos de una empresa que se está cayendo o parece anticuada.

Mejora de las condiciones laborales: Contar con un espacio de trabajo amplio y cuidado afectará de manera directa a tus empleados que se sentirán más seguros, cuidados y de mejor humor. ¡Las condiciones lo cambian todo!

Asegura la producción: Si tu local industrial está en óptimas condiciones la producción no se verá afectada, lo que te permitirá ajustarse a los objetivos, cumplir entregas, etc.

¿No sabes qué tipo de necesidades tiene tu nave industrial? ¿Crees que es hora de rehabilitar tu recinto industrial? ¡No esperes más y llámanos! En Construcciones RM te ayudaremos a cuidar de tu negocio.